Tu minuto diario de crecimiento personal
Soy muy despistada. MUY despistada. Del rollo Voy a devolver las pelis al videoclub e irme sin las pelis.(Sí… cuando había videoclubs y niños solos en las calles…)Volvía a por la película. Uy, voy a coger las gafas de sol que pega fuerte. Y se me olvidaba otra vez coger la peli. Del rollo estar hablando con Carlos y buscando el móvil en
Decía Chenoa el otro día en un artículo en El País.No leí el artículo, te digo la verdad, me bastó el titular. Me acuerdo bien de la primera edición de Operación Triunfo. Yo era muy de Chenoa. Tenía, en mi opinión, más personalidad y tablas que todos los demás juntos. Pero, ay, tenía carácter. Una mujer fuerte. Imperdonable. Y ganó
Gestioné proyectos, primero en consultoría en Deloitte y después en ING durante 12 años, utilizando 4 metodologías distintas: Ninguna en particularSix SigmaPrince 2Agile He tenido bastantes jefes de proyecto a mi cargo. Unos eran buenos. Otros no tanto. Los buenos lo eran usando six sigma, prince2, agile o lo que les pusieras.Los que no, eran consistentes en sus problemas con cualquier
Escuchaba un podcast sobre el informe de Google de 2020 de estados emocionales del consumidor, en base a las búsquedas realizadas. Lo usan las grandes marcas para adaptar su estilo de comunicación. Hablaban de como en marzo y abril se percibía una emoción común, la tristeza. Las búsquedas que despuntaron fueron, desgraciadamente, sobre ansiedad y psicólogos. La respuesta era unión y
Ayer leí por casualidad un chiste:– Le he dicho a mi mujer que quiero que me incineren.– Ha pedido cita para el jueves. Me hizo gracia.Buena señal. Decían del que lo contaba que era un tío raro con un sentido del humor peculiar.No sé. No lo conozco.Pero este humor es del de toda la vida. Quizá con tanto ser políticamente correctos, con
Cuenta Marie Kondo que empezó su cruzada con la organización cuando tenía 5 años. Imagínate a tus hijos queriendo ordenar. Por voluntad propia. [Luego pienso, que con mi capacidad infinita de preocupación maternal, lo mismo pensaba que les pasaba algo y todo. Que son raros]. Pues resulta que la pequeña Marie no se conformaba con ordenar su cuarto, si no
Una tarde casi incendio mi casa. Estábamos aún en Londres. Puse aceite en la olla y oí a David que se había metido una buena chufa. David no anda, corre, así que darse golpes estaba (y está) en su agenda diaria, pero este sonó mal.Me fui a consolarle. Estaba bien. Creo que le dolía más haberse cargado la vía del tren,
Cuando era pequeña me gustaba un chico que se llamaba Sergio. No me acuerdo mucho de él, pero sé que tenía rizos y le encantaba Queen. Yo por entonces sólo escuchaba Roxette y la música que ponía mi padre, Bob Dylan, Simon y Garfunkel, Cosas así. En toda mi sofisticación le decía a Sergio que Queen era la reina de
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